Alercops cumplirá tres años el próximo 1 de agosto. Esta aplicación permite conectar al ciudadano con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad (Guardia Civil y Cuerpo Nacional de Policía) facilitando el envío inmediato de alertas de seguridad. Conocemos sobradamente la situación y el nivel de alerta en que estamos. Si creemos en una seguridad colaborativa e inmediata, cualquiera de nosotros, pertenezcamos o no al sector de la Seguridad, tenemos en nuestra mano, en nuestro móvil, una forma rápida y directa de dar un aviso. Y ello contribuirá a mejorar el servicio que la Seguridad Pública nos presta al conjunto de la ciudadanía, a la vez que contribuirá a crear y fortalecer esa red social de seguridad a la que se refería el entonces Ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, en la presentación de esta aplicación.

Alertcops nos permite, en movilidad, conectar con las Salas Operativas de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Es decir, podemos alertar sobre un acto delictivo en prácticamente cualquier lugar y situación. Y dado que es una herramienta para móviles supone realmente universalizar el acceso a los Servicios Públicos de Seguridad Ciudadana. Fácil en su uso y muy intuitiva la app Alertcops indudablemente supone una mejora en las comunicaciones entre los ciudadanos y la Seguridad Pública. Nuestras alertas pondrán en marcha la maquinaria policial, siendo asignadas las tareas a quienes correspondan y manteniendo informado al ciudadano a través de la propia aplicación e incluyendo un chat para que de ser necesario la comunicación sea más directa. Indudablemente es un magnífico canal de comunicación para mejorar la seguridad ciudadana, adaptado a la tecnología y nuevas costumbres que éstas nos imponen en nuestra vida cotidiana.

La tecnología móvil nos permite o, más bien, nos induce a vivir como si estuviéramos en una perpetua situación de movilidad, y es a esto a lo que se orienta precisamente Alertcops, a abrir un canal de comunicación permanente con FFCCSS (Policía Nacional y Guardia Civil) en una situación de movilidad.

Además y no menos importante es que la expansión de una aplicación como ésta y su correcto uso dará contenido real a esa ambición, tantos años esperada, de “colaboración”. Los ciudadanos debemos colaborar en nuestra propia seguridad. En los momentos actuales, cuando el miedo a actos intencionados de carácter disruptivo, cuando los niveles de alerta antiterrorista son tozudamente altos y no tenemos a la vista el momento de una reducción de los mismos, quizá sea un buen momento para que aquellos de vosotros que aún no lo tengáis le deis un pequeño espacio en vuestro móvil y ahí, entre el Candy Crush y el Facebook tengáis hilo directo con quienes al fin y al cabo nos sacan las castañas del fuego.